- Los últimos despidos en el Grupo Joly son un nuevo golpe a una profesión que suma 20 años de recortes
La Asociación de la Prensa de Cádiz muestra su rechazo a las continuas reducciones de plantilla que están experimentando los medios de comunicación locales. El colectivo profesional no entiende que se precarice un oficio imprescindible para combatir los bulos y garantizar el derecho a la información.
La organización de periodistas lamenta el nuevo golpe que acaban de recibir las diferentes plantillas del Grupo Joly, y en concreto su cabecera decana, Diario de Cádiz. No sólo por lo que afecta a los compañeros que deben dejar su puesto de trabajo, sino porque pone de relieve una necesaria reflexión sobre el modelo de negocio de los medios de comunicación. Por desgracia no es una cuestión únicamente de este grupo empresarial. Los despidos son una tendencia que estamos viendo en la mayoría de empresas de este ámbito.
Somos conscientes de la crisis de ventas y la caída de publicidad, y asumimos que las empresas buscan la rentabilidad. Pero creemos que el continuo adelgazamiento de las redacciones locales acaba con su principal fortaleza: la cercanía. Los medios que no disponen de profesionales suficientes para contar lo que ocurre en su área de influencia y exponen a la plantilla que resiste a una sobrecarga de trabajo corren el riesgo de perder este contacto con su entorno y dejar de ser un referente para la ciudadanía. La precarización se cronifica en un oficio que ahora, en la era de la desinformación, es más necesario que nunca. Entendemos que puede haber otra salida a la crisis que es la apuesta por los contenidos de calidad que sólo pueden aportar profesionales, con formación y experiencia, que a menudo son los primeros en ser damnificados en el recorte de gastos. Profesionales que además han demostrado su valía y redoblado esfuerzo durante lo más duro de la pandemia, y que siguen viendo como se eliminan puestos de trabajo.
La APC pide a los poderes públicos que tomen medidas para garantizar el mantenimiento de medios de comunicación libres e independientes como garantía del derecho a la información veraz de la ciudadanía, y tenga en cuenta a este sector entre los más castigados por la precarización. Medidas que deben empezar por dar solución a la histórica reivindicación de los colectivos de periodistas con una normativa que de una vez por toda regularice la profesión, continuar con un reparto de publicidad institucional que prime a las empresas periodísticas que crean empleo e incluya cláusulas sociales asegurando que quienes las reciben mantienen plantillas profesionales en condiciones dignas de trabajo o con medidas de ayuda al sector y contra el intrusismo.
La APC también pide a los responsables de estas decisiones que recapaciten sobre sus consecuencias. El mantenimiento de redacciones fuertes y dotadas supone una mayor capacidad de posicionamiento y es el mejor modo de asegurar la viabilidad de las empresas de comunicación.
Por último, la APC desea a los afectados por estos ajustes la mejor suerte para afrontar su nueva etapa profesional y personal y se pone a su disposición para ofrecerles cobertura y apoyo en la defensa de sus derechos.